30.7.09

Sueños / A Elena

Sueños


Para Lucevan O. Berg, hermano en la poesía.


Anoche me soñé pez
muriendo a pedacitos.
Luego soñé la luna
escondida en una caja de zapatos.

Una fila de hormigas movía una araña.
-¡Niño, no te manches la ropa, ni los zapatos blancos ¡-

Quise soñarme hombre y me soñé poeta,
un infeliz que sueña
escondiéndose siempre de la Muerte.



A Elena

A Elena Burke


Tu voz, Elena, se empapa de salitre
cuando una ola se rompe entre las rocas
y subes desde el Malecón
hasta mi cuarto a solas.

Tu voz ampara mi soledad.
Y cada frase musical tuya se vuelve un gorjeo
que cae detrás de mis espaldas.

Una melodía nace de lo hondo de mi corazón.
Hecha con las notas de mi música que es un poco triste como yo…


Lenta, pausadamente,
se van inscribiendo una tras otra las notas
en la piel de mi memoria.

En el espacio sin muebles donde habito
y hasta en las líneas del techo,
como dijera Paul Eluard en un poema.

¡Salud, Elena!
¡Diva¡ ¡Reina definitiva de la noche!


René Dayre
La Habana (Años 60’s)